Sor María Loyola Barba, Construyendo escuelas excelentes

Sor María Loyola Barba (1921–2013) supervisó la construcción de los colegios de Chihuahua y de la Ciudad de México desde sus cimientos. Pero más que ladrillos y mortero, ella impulsó la formación del personal docente de los colegios. Sor María Loyola introdujo innovaciones que mejoraron la formación tanto de los maestros como de los alumnos, lo que fue vital para consolidar la excelente reputación de los colegios del Verbo Encarnado en México.

En vista de que muchos padres de familia querían que sus hijas asistieran al Instituto Miguel Ángel, Sor María Loyola encontró una nueva propiedad en la Colonia Florida, en la Ciudad de México, para dar cabida al creciente número de estudiantes. El nuevo colegio abrió sus puertas en 1967. Sor María Luisa Velez, que entonces daba clases en el colegio, es la tercera maestra a la derecha.

En el siglo XX, las estudiantes de los colegios del Verbo Encarnado en México recibían una educación sólida de alto nivel académico, materias optativas y temas relacionados con el arte y la vida en el hogar. En el siglo XXI, se prepara a los estudiantes para la vida vertiginosa de las ciudades en México.

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